Crónica FM + GUN (acústico)

Para los ingleses muy atrás quedaron los tiempos en los que la carrera del quinteto parecía signada por la falta de suerte. Recordando que justo en el momento en que todo parecía cuadrar para su definitivo despegue comercial, problemas en su sello discográfico, decisiones algo equivocadas del managment del momento y finalmente el cambio radical que sufrió la escena musical a principios de los años noventa, llevaron a que FM se convirtiera en un muy venerado grupo de culto dejándolo lejos de ser una banda amplia y merecidamente conocida por un público más masivo. Y lo cierto es que méritos no le faltaban para serlo.

Sin importarles demasiado y con algunos trabajos editados que son auténticos clásicos dentro del estilo, Steve Overland y sus compañeros siguen presentándose por todo el mundo con solo una intención: demostrar en directo el porqué de una muy firme y bien ganada reputación.

Desde que decidieron retomar de forma activa su carrera, mucha agua ha pasado bajo el puente, desde giras europeas junto a grandes “monstruos” del estilo como Journey, Foreigner o Europe, hasta aplaudidas participaciones en varios festivales, presentaciones en el Reino Unido y el resto de Europa que son casi una constante. Además, como si eso fuera poco, la reciente edición de un nuevo y muy respetable trabajo titulado “Thirteen”, es el motivo desencadenante de su actual gira.

También con un sonido decididamente bueno y muy sólido, Overland y compañía dieron inicio a una noche que deparaba no pocas emociones. Con una colección de composiciones que para los seguidores del mejor rock melódico son poco menos que sagradas, y si, además, le adicionamos una muy experta banda sobre el escenario, todo coincide como para que FM volviera a repetir e incluso mejorar la calidad expuesta en sus visitas previas. Con los veteranos Pete Jupp en la batería y Merv Goldsworthy en el bajo, conformando una formidable base rítmica, el siempre correcto teclista Jem Davis y el ya establecido guitarrista Jim Kirkpatrick, FM consigue reproducir de manera precisa y quizás más contundente que en sus grabaciones cualquiera de sus emblemáticos temas. Pero es el fenomenal vocalista Steve Overland quien con su voz logra darle esa calidad de casi inimitables y eternas a cada una de las composiciones que la banda magníficamente interpreta. Con un tono vocal que se adapta de manera formidable tanto al rock como al blues, al pop o al soul, Overland aún posee esas características que lo convirtieron en uno de esos cantantes injustamente ignorados, pero absolutamente impecables en cuanto su estilo y calidad.

Con fuerza, sutileza y emoción, cada una de sus intervenciones logra realzar composiciones que hechizan por sí solas. Desde “Synchronized” pasando por “Killed by Love”, “Dont Stop”, “Crack Alley” y las fascinantes e insuperables “Let Love be the Leader”, “I Belong to the Night”, “Frozen Heart” y “Bad Luck”, todas fueron parte de un setlist que también incluyó “nuevos clásicos” como “Life is a Highway”, “Long Road Home” y “Turn This Car Around” pero paralelamente dejó afuera algunas perlas como “Dangerous”, “Someday” o “Everytime I Think of You”.

Evidentemente no es posible contentar a todos. Sin innecesarios virtuosismos, ni aburridos intermedios instrumentales, FM luchó y consiguió atrapar a una audiencia que recibió exactamente lo que fue a buscar: calidad, entretenimiento y, sobre todo, confirmar que la banda aún mantiene viva esa chispa que la convirtió en una de las preferidas dentro del estilo.

Para el cierre, la muy emotiva versión acústica de “Story of my Life” y “The Other Side of Midnight”, lograron concluir una noche que pasó demasiado rápida y que seguramente dejó con ganas de más a no pocos presentes.

Nueva visita de FM a España y afortunadamente, en el aspecto musical, interpretativo y profesional, la agrupación sigue siendo tan consistente y ajustada como en sus mejores años. Muy merecidamente el quinteto inglés se despidió con una monumental ovación por parte de una audiencia que los valoró por lo que son y no por lo que fueron, algo que hoy por hoy no es poca cosa.

Con una muy buena afluencia de público, los escoceses GUN abrieron la noche mediante un set acústico con un sonido claro y nítido, desarrollando sin obstáculos sus entradoras y conocidas de sobra composiciones.

Siempre conducidos por los hermanos Dante Gizzi en la voz y bajo y Jools Gizzi en la guitarra, sumándose además Tommy Gentry también en guitarra, con canciones como “Taking on the World”, “Shame on You”, “Inside Out”…, o la marchosa “Better Days” lograron que el trío saliera airoso del escenario, enganchando a todos los presentes casi desde el primer acorde y allanando el camino para que FM subiera a escena con un público dispuesto a disfrutar del concierto.