Muy atrás han quedado los tiempos en los que los británicos Praying Mantis era una de las grandes promesas de aquella primera tanda de excelentes bandas que la esplendorosa N.W.O.B.H.M. supo enclavar por todo el mundo. Con el paso del tiempo, al igual que les sucedió a muchos de sus contemporáneos, ya sea por suerte adversa, o tan solo el destino, no lograron que la agrupación ocupara un lugar de privilegio como el que justamente obtuvieron algunos de sus muy ilustres colegas, como por ejemplo Iron Maiden, Def Leppard, Venom o Saxon, solo para nombrar a los más relevantes actualmente.
A pesar de haber editado excelentes trabajos de estudio como “Time Tells No Lies”, “Forever in Time”, “A Cry For the New World”, “Predator in Disguise” o de contar en sus filas, aunque solo fuera momentáneamente, con nombres de músicos relevantes como Paul Di’Anno (Iron Maiden), Gary Barden (MSG), John Sloman (Uriah Heep), Dennis Stratton (Iron Maiden), Doogie White (Rainbow), Clive Burr (Iron Maiden) y la lista sigue y sigue… Praying Mantis pareció conformarse y sentirse a gusto con el lugar casi secundario que en el mundo del rock les fue concedido y regularmente han seguido editando interesantes discos al igual que presentándose en directo.
El quinteto, siempre liderado por los hermanos Tino Troy en la guitarra (ex Escape, Pady Ggoes To Holyhead, Stratus, Junktion) y Chris Troy en el bajo bajista (ex Escape, Pady Ggoes To Holyhead, Stratus, Junktion), presenta hoy su nuevo trabajo titulado “Defiance” e indiscutiblemente aún se aprecian restos de aquellas apabullantes guitarras gemelas, coros memorables y ajustadas melodías, pero si buscas la potencia y ese filo sonoro que fueron sellos distintivos en sus primeros discos, es mejor que no lo hagas en esta obra. Enmarcando su propuesta actual en un Rock Melódico de claro corte europeo, melodías propias de AOR y hasta coqueteos con la música bailable (basta con escuchar “Standing Tall”), los hermanos Troy dejan que ahora los teclados formen parte integral y básica del sonido de los Mantis y que, en ocasiones, las guitarras pasen a un lamentable segundo plano.
Nuevamente, al igual que en entregas anteriores, es el vocalista Jaycee Cuijpers quien sale al rescate y eleva el nivel del disco de manera notable. Basta con escuchar su extraordinaria performance en composiciones como “Feelin’ Lucky”, “Let’s See”, la emotiva “Forever in My Heart”, la atrapante “Give It Up” o la descomunal versión del clásico de Russ Ballard “I Surender” para comprobar que su fortaleza y emotividad vocal son superlativas.
En síntesis, “Defiance” es un muy disfrutable trabajo en donde, si bien se extrañan algunos de los elementos más enérgicos del sonido primitivo de Praying Mantis, paralelamente y aun exponiendo algunas inconsistencias, logra preservar esa fidelidad, calidad e invariable forma de entender y desplegar la música que les dio un razonable, aunque limitado, territorio por el que transitan desde hace décadas.
Javier Izurieta
“Time Tell No Lies”, “Live At Last”, “Predator In Disguease”, “A Cry For The New World”, “To The Power Of Ten”, “Capture Alive In Tokyo City”, “Forever In Time”, “Demorable” (recop. Maquetas, inéditos), “Nowhere To Hide”, “The Journey Goes On”, “The Best Of Praying Mantis” (recop), “Sanctuary”, “Metalmorphosis – 30th Anniversary Album”, “Legacy”, “Gravity”, “Keep It Alive!” (directo), “Katharsis”, y “Defiance”