
Es reconocido que, en su tiempo y momento, un variado conjunto de bandas canadienses consiguió jugar en primera división, basta con recordar a Steppenwolf, BTO, Rush, Triumph, April Wine o Loverboy entre varias. Por otra parte, una enorme selección de agrupaciones de la misma nacionalidad, casi acariciaron el tan anhelado suceso internacional y comercial, sin embargo y pese a sus esfuerzos, sólo lograron pertenecer a una muy meritoria segunda categoría. Son muchos los ejemplos, desde Helix, Coney Hatch o White Wolf pasando por Saga, Stonebolt, Alias y hasta Von Groove o Harem Scarem, siendo ciertamente Honeymoon Suite otro integrante de este vasto pelotón.
Con sus tres primeros trabajos que aún hoy son reverenciados por la mayoría de los seguidores del Hard Rock Melódico, el quinteto supo ganarse un muy merecido lugar y, a partir de allí, el grupo trató de refinar su propuesta perdiendo cierta potencia y entradoras melodías en busca de actualizar un tanto su sonido final, consiguiendo que varios de sus álbumes posteriores, como “Hands Up” o “Dreamland”, navegaron en la intrascendencia.
Hoy nos llega “Wake Me Up When the Sun Goes Down” en donde la banda todavía dirigida por el competente vocalista Johnnie Dee y el guitarrista Derry Grehan, consigue parcialmente devolver a los canadienses al terreno musical por el que son altamente valorados. La constante del disco es la diversidad de estilos que, en su totalidad, logran convencer al oyente. Indudablemente, los temas más resueltos y directos como “Crazy Life” o “Way of the World” son los que llevan las de ganar, mientras que los más armoniosos “Live On”, “Keep This Love Alive”, “Every Minute” y hasta la emotiva balada “Way to Fast” consiguen que Honeymoon Suite defienda de manera firme, con toda eficacia y calidad, lo que desean transmitir.
No esperes aquel Hard Melódico ochentero que sacudía tus emociones con solo una audición, “Wake Me Up When the Sun Goes Down” es un trabajo que gana aceptación y aprobación después de varias escuchas dejando claramente señalado que Honeymoon Suite no ha perdido su credibilidad y convicción para producir un disco de indudable valía aunque, paralelamente, difícilmente convenza plenamente a aquellos más tradicionales y conservadores incondicionales del grupo.
Javier Izurieta