Crítica ECLIPSE “Megalomanium”

Consolidados desde hace ya varios años como un referente ineludible del mejor rock potente, directo, pero sin perder una profunda esencia melódica, la agrupación sueca Eclipse vuelve a la acción con un nuevo álbum que presenta algunas notorias diferencias con respecto a trabajos anteriores pero que nunca pierde esa identidad sonora con la que el cuarteto supo labrarse una merecida gran reputación luego de más de dos décadas de una muy interesante y prolífica carrera.

Como siempre comandados férrea y sabiamente por Erik Martensson (voz/guitarra) y su eterno compañero Magnus Henriksson (guitarra), secundados desde hace varios años por los hermanos Philip y Victor Crusner (batería/bajo respectivamente), el grupo en su nueva obra introduce o adiciona nuevos elementos que, si bien nunca le fueron ajenos, ahora tienen una clara exposición y forman parte de su estructura musical.

Partiendo de una ampliación en la intensidad sonora y la energía que los aproxima al metal moderno, adentrándose en zonas más densas que bordean un heavy metal clásico, desafiando sus propios límites en cuando el vértigo rítmico en varias de las composiciones, todo ello siempre dentro del marco melódico y casi emocional por el cual Eclipse sabe cómo desenvolverse perfectamente. De hecho, los cambios llegan incluso al punto que, por primera vez, alguien (en este caso Victor Crusner) se hace cargo de la parte vocal líder de una canción (“High Road”) dejando un merecido descanso a Martensson.

A pesar de la evolución sonora por la que el cuarteto decidió resolver la propuesta musical de este disco, no relega para nada su inconfundible estilo y características que los han convertido en todo un emblema y en uno de los más distintivos representantes del mejor rock melódico, contundente y enérgico, a nivel mundial.

“Megalomanium” representa un par de pasos fuera de la zona de confort de Eclipse, apostando un tanto por la diversidad y potencia suplementaria, pero a la vez, mantiene todos aquellos elementos que convirtieron a Martersson y los suyos en una marca casi registrada, con sonido propio, fácilmente identificable y que es garantía de calidad más allá de los cambios que los más puristas seguidores del hard rock melódico quieran impugnar.
Javier Izurieta

Discografía:

“The Truth & Little More”, “Second To None”, “Are You Ready To Rock”, “Bleed & Scream”, “Armageddonize”, “Monumentum”, “Paradigm”, “Viva la Victoria” (directo), “Wired” y “Megalomanium”